Cuento: Las aventuras de las vocales
Las aventuras de las vocales para aprender la A, E, I, O, U
En un pequeño pueblo llamado Abecedario, vivían cinco amiguitas muy especiales: A, E, I, O y U.
Cada una tenía una casa de colores brillantes y les encantaba salir a jugar juntas.
A era roja como una manzana, E era verde como una esmeralda, I era amarilla como el sol, O era azul como el océano y U era morada como las uvas.
Todos en el pueblo las querían mucho porque sabían que las vocales eran muy importantes para formar palabras.
Una mañana soleada, A, E, I, O y U decidieron ir al parque a jugar.
A saltó y gritó «¡Aaa!» mientras imitaba el sonido de una abeja.
«¡Aaa! ¡Aaa!» repetían sus amigas.
Luego, E sugirió jugar a las escondidas.
Mientras corría, E se reía y decía «¡Eee! ¡Eee!».
Las demás vocales la imitaron y se rieron juntas.
Cuando llegó el turno de I, propuso jugar a atrapar mariposas.
Cada vez que atrapaba una, decía «¡Iii! ¡Iii!» y sus amigas también lo hacían, llenando el parque de risas.
O, que siempre tenía buenas ideas, decidió que era el momento de un concurso de canto.
Cantó «¡Ooo! ¡Ooo!» con su voz melodiosa, y las otras vocales la siguieron con entusiasmo.
Finalmente, U, que era muy curiosa, encontró un charco de agua y empezó a salpicar diciendo «¡Uuu! ¡Uuu!».
Las demás vocales se unieron, creando pequeñas olas en el charco.
Al final del día, las cinco vocales estaban muy cansadas pero felices.
Se sentaron bajo un árbol y comenzaron a recordar todas las cosas que habían hecho.
«Hoy hemos aprendido lo importantes que somos para hablar y jugar», dijo A.
«Sí, y también que cuando estamos juntas, podemos hacer muchas cosas divertidas», agregó E.
Las amigas se abrazaron y prometieron seguir jugando juntas para enseñar a todos los niños las vocales.
NOTA: Más abajo tienes todo este mismo cuento escrito con MAYÚSCULAS por si lo necesitas)
Moraleja del cuento » Las aventuras de las vocales»
Aprender es divertido cuando lo hacemos con amigos.
Abraham Cuentacuentos.
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LAS AVENTURAS DE LAS VOCALES PARA APRENDER LA A, E, I, O, U
EN UN PEQUEÑO PUEBLO LLAMADO ABECEDARIO, VIVÍAN CINCO AMIGUITAS MUY ESPECIALES: A, E, I, O Y U.
CADA UNA TENÍA UNA CASA DE COLORES BRILLANTES Y LES ENCANTABA SALIR A JUGAR JUNTAS.
A ERA ROJA COMO UNA MANZANA, E ERA VERDE COMO UNA ESMERALDA, I ERA AMARILLA COMO EL SOL, O ERA AZUL COMO EL OCÉANO Y U ERA MORADA COMO LAS UVAS.
TODOS EN EL PUEBLO LAS QUERÍAN MUCHO PORQUE SABÍAN QUE LAS VOCALES ERAN MUY IMPORTANTES PARA FORMAR PALABRAS.
UNA MAÑANA SOLEADA, A, E, I, O Y U DECIDIERON IR AL PARQUE A JUGAR.
A SALTÓ Y GRITÓ «¡AAA!» MIENTRAS IMITABA EL SONIDO DE UNA ABEJA.
«¡AAA! ¡AAA!» REPETÍAN SUS AMIGAS.
LUEGO, E SUGIRIÓ JUGAR A LAS ESCONDIDAS.
MIENTRAS CORRÍA, E SE REÍA Y DECÍA «¡EEE! ¡EEE!».
LAS DEMÁS VOCALES LA IMITARON Y SE RIERON JUNTAS.
CUANDO LLEGÓ EL TURNO DE I, PROPUSO JUGAR A ATRAPAR MARIPOSAS.
CADA VEZ QUE ATRAPABA UNA, DECÍA «¡III! ¡III!» Y SUS AMIGAS TAMBIÉN LO HACÍAN, LLENANDO EL PARQUE DE RISAS.
O, QUE SIEMPRE TENÍA BUENAS IDEAS, DECIDIÓ QUE ERA EL MOMENTO DE UN CONCURSO DE CANTO.
CANTÓ «¡OOO! ¡OOO!» CON SU VOZ MELODIOSA, Y LAS OTRAS VOCALES LA SIGUIERON CON ENTUSIASMO.
FINALMENTE, U, QUE ERA MUY CURIOSA, ENCONTRÓ UN CHARCO DE AGUA Y EMPEZÓ A SALPICAR DICIENDO «¡UUU! ¡UUU!».
LAS DEMÁS VOCALES SE UNIERON, CREANDO PEQUEÑAS OLAS EN EL CHARCO.
AL FINAL DEL DÍA, LAS CINCO VOCALES ESTABAN MUY CANSADAS PERO FELICES.
SE SENTARON BAJO UN ÁRBOL Y COMENZARON A RECORDAR TODAS LAS COSAS QUE HABÍAN HECHO.
«HOY HEMOS APRENDIDO LO IMPORTANTES QUE SOMOS PARA HABLAR Y JUGAR», DIJO A.
«SÍ, Y TAMBIÉN QUE CUANDO ESTAMOS JUNTAS, PODEMOS HACER MUCHAS COSAS DIVERTIDAS», AGREGÓ E.
LAS AMIGAS SE ABRAZARON Y PROMETIERON SEGUIR JUGANDO JUNTAS PARA ENSEÑAR A TODOS LOS NIÑOS LAS VOCALES.
Abraham Cuentacuentos.
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